Archive for the ‘Gente’ Category

Can Daguerre

November 26, 2018

Por la dignificación del Raval

November 8, 2018

 

Un personatge marcadament barceloní

September 12, 2017

«Jo crec que el carterista és un personatge marcadament barceloní. És clar que hi ha carteristes a París i a Madrid i a València i a Nova York, però són, al meu entendre, una altra mena de carteristes, menys hàbils, menys correctes, menys fins, menys especialitzats que els de casa nostra. Suposo que el lector no creurà pas que el meu orgull de català em faci exagerar la nota patriòtica fins a vantar-me d’haver nascut al país dels millors carteristes del món. No. Però tinc un especial interès a remarcar que el carterista barceloní ha contribuït, en certa manera, a donar un relleu internacional a la nostra ciutat. Imagineu-vos un monsieur Dupont que ha vingut a visitar l’Exposició i que se n’ha tornat a París sense haver tingut l’emoció de quedar-se sense cartera o sense haver experimentat la sorpresa d’haver-se trobat amb un parell de duros “sevillanos”. Què passarà? Passarà que monsieur Dupont tindrà un vague record de Barcelona i que al cap d’un temps s’anirà oblidant de la nostra ciutat massa cosmopolita, massa moderna, massa europea. En canvi, l’incident d’una sorpresa a base de duros “sevillanos” i l’aventura de quedar-se misteriosament sense rellotge i sense cartera és d’aquelles que no s’obliden fàcilment…
—Barcelona? —dirà—. Ah… una gran ciutat… Quan jo vaig anar-hi varen prendre’m la cartera… Quina mà tenen els carteristes barcelonins… Són uns asos, uns veritables asos!… No sentiu res, no us adoneu de res… i tanmateix a l’hora de pagar la nota us trobeu sense cartera… Aneu-hi, aneu-hi!». (Domènec de Bellmunt, 1930)

Las voces de la Barceloneta

June 17, 2015

«A los vecinos hay que hacerlos desaparecer como sea.»

«Un model de barri que ens expulsa, als veïns.»

«Els canvis són tan ràpids que no tinc temps de digerir-los.»

Si quieres ponerles rostro, no te pierdas este interesante documental:

http://blogs.ccma.cat/senseficcio.php?itemid=55886&catid=1270

segunda

Les dones del Cànem

November 16, 2012

“[Al meu barri] teníem fàbriques. Moltes fàbriques. […] Amb les fàbriques també teníem criatures de nou, de deu anys, deformades, raquítiques, enllefernades, forçades a suportar jornals de dotze a catorze hores; dones embotornades, ventrudes, tenyides amb els colors de la fam, de la pudor, d’una misèria que les arrapava fins que morien als vint-i-cinc, als trenta anys, a tot estirar i amb sort als quaranta.

Entre els meus primers records hi ha aquestes dones i aquestes criatures. Exhalaven un tuf espès d’olis pesants, d’espart, de borra, de misèria. Com si no tinguessin edat, com si fossin bèsties de bast, energia a baix preu. […]

A les nou o les deu de la nit, aquelles dones i aquelles criatures sortien com un ramat de la cleda. Brutes, exhaustes, com somnàmbules. La majoria enfilava el camí de Pequín o de la Marbella, residències poètiques entre clavegueres, als sorrals de la platja, un carreró miserable, nauseabund, que en una banda tenia l’elevat terraplè de la vida del tren, i a l’altra, el mar, sense cap mena de defensa, i que en topar amb el desguàs de la xarxa de les clavegueres quedava abruptament tallat.” (Xavier Benguerel, El Poblenou)

Diputació con Roger de Llúria

July 18, 2011

Este es el lugar de Barcelona en el que, ahora hace 75 años, Agustí Centelles tomó la fotografía que daría la vuelta al mundo como símbolo de la lucha de la República contra los militares sublevados. El guardia de asalto descamisado se llamaba Mariano Vitini. Dejemos que sus descendientes nos cuenten su historia: clic.

El payo Chac

June 3, 2011

Las historias de amor con final feliz siempre gustan, ¿verdad? Como la del fotógrafo y cineasta francés Jacques Leonard (1909-1995), que, después de mucho viajar, se instaló en la Barcelona de 1953 “por culpa” de una bella gitana del clan de los Amaya. Pese a que su infancia transcurrió en un entorno acomodado, a Jacques le tocó vivir en un piso de protección oficial de La Mina, pero junto a su Rosario, claro está, pues “contigo, pan y cebolla”. Mientras tanto, tuvo el privilegio de documentar el mundo de los gitanos barraquistas desde dentro, como nadie antes lo había hecho. Un interesante documental, Jacques Leonard, el payo Chac (2011), nos descubre ahora su figura. Además, el Arxiu Fotogràfic de Barcelona exhibe algunas de sus mejores fotografías hasta enero de 2012. Para saber más sobre él: jacquesleonard.wordpress.com.

“Jo, que trempat visquí!”

May 16, 2011

En la Barcelona del Antiguo Régimen se inhumaba a los muertos junto a las iglesias. A finales del siglo XVIII, el crecimiento de la población urbana y el avance de las doctrinas higiénicas hicieron que se construyera un nuevo cementerio a las afueras de la ciudad, en el Poblenou. A los barceloneses no les gustaba este lugar, tan alejado de todo, pero, a raíz de la gran epidemia de fiebre amarilla de 1821, que mató a 8.000 personas, los cementerios de siempre quedaron desbordados y no hubo más remedio que recurrir al del Poblenou. A mediados del siglo XIX, ya fue necesario ampliarlo.

En el Poblenou hay enterrados personajes ilustres como Narcís Oller, Xavier Benguerel, Serafí Pitarra, Josep Anselm Clavé, Narcís Monturiol, Josep Llimona, Mary Santpere o José Luis de Vilallonga, entre otros muchos, y se alzan imponentes mausoleos de banqueros, industriales y comerciantes del siglo XIX que quisieron exhibir en sus casas eternas la riqueza que les sobró en vida.

No obstante, los inquilinos más populares del cementerio son dos difuntos muy humildes. El primero, Francesc Canals i Ambrós, un empleado de los almacenes El Siglo de la Rambla que murió en 1899, con tan sólo 22 años. Al parecer, Francesc predijo en su lecho de muerte que su padre ciego recuperaría la vista, cosa que en verdad acontenció una vez muerto él. Desde entonces, la gente empezó a llamarlo “santet” (‘santito’) y a rezarle para solicitarle favores. Como la tradición popular le atribuye algún que otro milagro, su tumba está siempre llena de flores, velas encendidas, exvotos y notas manuscritas con peticiones.

Del segundo inquilino no sabemos mucho, sólo que se llamaba Josep Verneda y que murió antes de tiempo por culpa de un médico desatinado. O al menos eso pensaban quienes encargaron su impagable epitafio: “Josep Verneda em diguí. Jo, que sense mal ni dañs, pasats setanta nou añs, robusto y trempat visquí, un metje…, no diré qui, sols un dia em visità, un vomitiu m’ordenà, responguí que no’l volia, ell digué que’m curaria, i vas morir l’endemà.” [“Josep Verneda me llamé. Yo, que sin mal ni daños, cumplidos setenta y nueve años, robusto y sano viví, un médico, no diré quién, sólo un día me visitó, un vomitivo me mandó, respondí que no lo quería, dijo él que me curaría, y me morí al día siguiente.”] Genio y figura, hasta la sepultura.

Polémicas trasnochadas

November 15, 2010

Se reaviva cada dos por tres el debate acerca de si Colón era catalán, balear, portugués, castellano o gallego, entre otras muchas nacionalidades. Alegan los italianos (y sólo ellos) que bien claro pone al pie del más famoso retrato que del almirante se conserva (retrato poco fiable, podríamos añadir) que era hijo de un artesano genovés. Aducimos los catalanes (y sólo nosotros) que de los textos en castellano del puño y letra del almirante brotan constantemente catalanadas como “a todo arreo” (a tot arreu), “todo de un golpe” (tot d’un cop) o “nombre” (número). Hacen ver los baleares que los topónimos con que Colón bautizó las costas descubiertas guardan un asombroso parecido con los de Ibiza y Formentera, y los gallegos, que son idénticos a los de la ría de Pontevedra.

Los aires de globalización y multiculturalidad que corren en nuestros tiempos dan pie a una tregua: ¿acaso no era Colón un poco de todas partes? Conocía el hebreo, el latín, el castellano y el portugués; navegó por los mares del Norte, el Mediterráneo, el Atlántico y el Caribe; sirvió a reyes de aquí y de allá; convivió con gentes de culturas alejadas y lenguas diversas. Colón nunca dejó escrita una letra, que se sepa, sobre su lugar de nacimiento, ni reivindicó a voces su origen. Los problemas identitarios no parece que le preocupasen mucho, la riqueza y la gloria, bastante más.

En 1888, Barcelona se sumó a la polémica alzando una descomunal estatua que recuerda los estrechos vínculos del descubridor con Cataluña. Merece la pena detenerse a observar las imágenes que adornan la base y que representan a Lluís de Santàngel (el converso valenciano afincado en Barcelona que ayudó a financiar el viaje de 1492), Jaume Ferrer de Blanes (un astrónomo catalán a quien Colón pidió consejo antes de zarpar), Bernat de Boïl (un monje de Montserrat que se embarcó en la segunda expedición) y Pere de Margarit (el jefe militar del segundo viaje). En particular, llama la atención la actitud sumisa del indígena americano que besa la cruz que Bernat de Boïl le ofrece. Lo mismo que al debate sobre la patria de Colón, se diría que a esta escultura le ha vencido la fecha de caducidad.

Las Arenas, 1919-2011

October 28, 2010

A principios del siglo XX, la Barcelona Traction, Light and Power (popularmente conocida como La Canadenca porque se había constituido en Toronto en 1911) era la principal compañía de producción eléctrica de Cataluña. Corrían tiempos de gran agitación política y social. El 12 de febrero de 1919, sin ir más lejos, estalló en La Canadenca una huelga muy dura, promovida por la CNT, que dejó a oscuras Barcelona y se extendió como un fuego bien aventado hasta paralizar la mayor parte de la industria catalana. Tras muchos días de negociaciones, los dirigentes sindicales consiguieron que el gobierno de Romanones se comprometiera a liberar a los tres mil obreros que había encarcelado y a decretar la jornada laboral de ocho horas, y que la empresa ofreciese readmitir a todos los huelguistas despedidos y subirles el salario. Algunos radicales, no obstante, pretendían continuar la movilización hasta desencadenar una revolución proletaria. Fue el secretario general de la CNT de Cataluña, Salvador Seguí (1886-1923), quien, el 19 de marzo, durante un mitin en la plaza de toros de Las Arenas, logró que se aceptasen los acuerdos con un memorable discurso que fue seguido por más de veinte mil obreros en un silencio sepulcral.

Los tiempos cambian. Se anuncia ahora que pronto abrirá sus puertas en la antigua plaza el centro comercial Les Arenes, un auténtico edén de bienestar que tendrá 126 tiendas, 12 salas de cine, un gimnasio con piscina, ocho restaurantes, el Museo del Rock, un espacio multiusos, oficinas y parking. Será en marzo de 2011, coincidiendo con el 92 aniversario de la aprobación de la jornada de ocho horas.